lunes, 5 de diciembre de 2011

¿Estoy aprendiendo del recorrido o solo quiero llegar a la meta?

A lo largo del camino vamos descubriendo que la meta que en un principio nos habíamos marcado solo nos ha servido de ilusión y de motor para continuar.
Cuando vamos andando nuestro objetivo va transformándose, es decir, lo importante y lo valioso son las experiencias y lo bueno que podamos sacar de ellas.
Nos llenamos de valores, también de decepciones, de sentimientos buenos y malos de nuevas ilusiones, de ideas diferente a las nuestras, conocemos personas que nos aportan cosas buenas y a las que nosotros debemos enseñar algo beneficioso, experimentamos nuevos caminos y poco a poco vamos llenando nuestra mochila de momentos que nos van haciendo madurar como personas y que sin darnos cuenta han cambiado nuestra forma de ver la meta, ahora tenemos una visión completamente distinta.
Hay personas cuyos objetivos son, la felicidad plena, que nunca encuentran ya que solo existe en ráfagas y ellos intentan encontrarla en las grandes cosas cuando realmente está en los pequeños detalles, existen personas que intentan llenar sus vacíos interiores con cosas materiales y van descubriendo cada día que nada les satisface realmente porque no han sabido aprender de su trayecto. Para otros, su única meta es el éxito y lo basan todo en el triunfo, por tanto se decepcionan, ya que no siempre triunfan y siguen ciegos ante el recorrido que sería el que de verdad les aportaría el triunfo que vale la pena, el triunfo interior.
Debemos aprovechar y luchar por el aprendizaje de ese trayecto porque es lo que va a llenarnos y nos va a servir de gran ayuda, pero sí, es cierto que necesitamos de esa meta, que no deja de ser la luz que nos conduce y que nos impulsa a caminar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario